Vamos a hacer un repaso a algunos de estos alicientes para visitar la ciudad de Verona:
La Arena de Verona
Un teatro romano con más de dos mil años de antigüedad y que alberga la ópera más grande de Italia con cabida para 15.000 personas.
Si tienes la oportunidad de disfrutar alguna obra o concierto, no dudes en experimentar este espectáculo.
Hablamos del segundo anfiteatro más grande del mundo, solo por detrás del Coliseo romano.
El Ponte Scaligero
También es conocido con el nombre de Ponte Castelvecchio, gracias a la fortaleza del mismo nombre que tiene cerca.
Puedes cruzar el rio Adige por sus 50 metros de recorrido que en el momento de su construcción fue el más largo del mundo (año 1356).
Las vistas de la ciudad desde el puente son excepcionales.
Castillo de Castelvecchio
Cerca del puente, encontramos esta fortaleza del s.XIV de estilo gótico donde será interesante visitar el museo dedicado a la historia de la ciudad, además de sus estanques y jardines.
Si quieres una buena fotografía, aprovecha el reflejo de esta fortaleza en el rio Adige.
La Piazza delle Erbe
Uno de los lugares emblemáticos de la ciudad, donde tenemos muchas atracciones turísticas a las que atender.
Situada en un antiguo foro romano, aquí podemos visitar y contemplar: el ayuntamiento de la ciudad, la Torre Lamberti (con unas vistas geniales de toda Verona), la Fuente Britney, la Torre Gardello que data del s.XIV, o el Palacio Maffei con su mercadillo y sus estatuas de dioses griegos.
Como podéis imaginar, es un lugar ideal para hacer una parada y tomar un cafe rodeado de todos estos lugares.
La Catedral de Santa Maria Matricolare
Construida en el s. XII de estilo románico, aunque se fueron agregando añadidos hasta el s. XV, de hecho, en el interior veremos tres de sus naves en estilo gótico con pilares de mármol rojo.
Anexo podemos visitar la pequeña iglesia de Santa Elena y el Claustro.
La casa de Julieta
Al menos eso es lo que se dice, ya que cualquier visitante busca algo relacionado con la famosa obra de Shakespeare, qué mejor que este palacio gótico del siglo XIII, con su balcón en que podemos imaginar a la amante Julieta esperando a su amado Romeo.
Alli mismo tenemos una escultura de Julieta en la que tendrás que hacer cola para poder fotografiarte. Y no olvides tocarle una teta, ya que dicen que te traerá suerte.
En cuanto a la gastronomía lo tenemos bastante fácil, ya que la cocina italiana es conocida por todos, por lo tanto algún plato de pasta, risotto o cocidos típicos, acompañados de un buen vino de la zona, como los de Valpolicella.
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