La Habana, esencia dormida en el tiempo


Panorámica de La Habana en Cuba


La Habana es única por muchísimos motivos, en primer lugar por las características políticas, que la hacen permanecer inmune a los cambios tan radicales que percibimos en el resto del planeta. También por su agradable y cálido clima. Una ciudad con unas calles y un estilo inconfundiblemente colonial y un trato humano incomparable por parte de sus gentes son quizás, los principales motivos de que esta capital caribeña reciba a miles y miles de turistas cada año.

Comenzamos nuestra visita en pleno centro de la ciudad, en la zona de La Habana vieja, nada más llegar percibimos que aquí los años apenas han pasado, ya que se conserva perfecta la esencia colonial. Este barrio, de hecho, conserva multitud de edificios del siglo XVI, los más antiguos de toda la ciudad. Es el barrio colonial más grande de toda América Latina.

Continuando con los paseos por La Habana más característica, seguimos en El Malecón. Es sin duda el barrio más famoso de la ciudad. Esta conformado por una bonita avenida al lado de la costa, tiene una longitud de ocho kilómetros.

El Malecon de La Habana


Si para cambiar de aires, necesitamos algo de playas. Cerca de La Habana se encuentran las conocidas como Playas del Este. Las mismas son unas playas de arena blanca y poca concurrencia de gente que garantizan tranquilidad y reposo en un ambiente paradisíaco.

En definitiva, La Habana no te defraudará tanto si te gusta la historia, los paisajes, la playa, la gastronomía. Cada rincón de la ciudad ofrece al turista una experiencia inolvidable y única.

Increíbles playas de arena blanca en Cuba




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