En la entrada de hoy vamos a
daros unos consejos para moverte en
metro por New York, para que así no te pierdas y ahorres tiempo.
MetroCard
Coger un taxi de vez en cuando puede ser toda una experiencia, pero es mucho
más económico comprar una MetroCard
que sirve para cualquier autobús o metro.
Esta tarjeta se puede adquirir en máquinas
expendedoras situadas en las estaciones y se pueden cargar por tiempo o
cantidad de viajes.
Si tienes en mente realizar un
montón de viajes quizás la opción más adecuada sea la “Unlimited ride”, que por 31
dólares te permite coger el bus o
metro que quieras durante una semana. Por el contrario, si apenas te vas a
mover puedes cargar tu MetroCard con
una cantidad determinada, lo que se llama “Pay-per-ride”,
con la que ahorrarás un poco con respecto a los 3 dólares que cuesta un billete sencillo.
Del aeropuerto al hotel
Esto va a depender en gran medida
de la comodidad que quieras y del número de maletas, por lo que si viajas
ligero de equipaje el metro es la
alternativa más rápida y económica. Un detalle importante es que prácticamente ninguna estación de Nueva
York está adaptada con rampas y toca subir un montón de escaleras. Por lo
tanto, si temes que sea demasiado cansado lo mejor es que tomes un taxi.
Viajando en metro
Los cambios de metro pueden llegar a confundir al principio, pero con un mapa y un poco de práctica se
coge el ritmo sin problemas. Lo mejor que tienen es que funcionan ininterrumpidamente las 24 horas del día y lo malo es que
como hay cientos de kilómetros de vías es
muy frecuente que la ciudad esté constantemente en obras, sobre todo por
las noches y fines de semana que es cuando los metros sufren más cambios de
horario.
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